Primeramente preparamos el terreno. Con una azada removemos bien toda la tierra haciendo una hilera. Cuando la tierra esté bien suelta le damos un poco de altura para que las fresas queden un poco altas para evitar que los bichos se coman nuestras fresas.
Posteriormente cubrimos con un plástico negro (en las ferreterias tienen plástico para fresas). El plastico evita que crezcan las malas hierbas y ayuda a las plantas de la fresa a mantenerse húmedas.
Por último para plantar las fresas vamos haciendo unos agujeros en el plástico e introducimos la planta y presionamos ligeramente. Regamos, y a esperar la cosecha que seguro que será muy rica.